El hierro se constituye como uno de los materiales más utilizados en la construcción. Ya sea que se trate de una obra de pequeña, mediana o gran envergadura, el hierro se presenta como un aliado indispensable, que dotará a la obra de seguridad, firmeza, sobriedad y elegancia.
Es por ello que es importante conocer acerca de este material, que es sumamente maleable pero a su vez confía dureza a cualquier obra que se emprenda.
Tal como se expresaba anteriormente, el hierro posee infinidad de usos en la construcción. Para esto, es necesario conocer los distintos tipos de hierro que existen, y sus distintas aplicaciones en la construcción.
Así, por ejemplo, existe el hierro en láminas onduladas o lisas. Las primeras se utilizan en el revestimiento de paredes y cubiertas, entre otros usos, mientras que las segundas pueden conseguirse en varios grosores y son utilizadas en infinidad de aplicaciones.
El hierro también puede ser visto en la construcción en forma de barras. Las cuadradas son aplicadas básicamente como refuerzo de paredes, ya sea en forma horizontal o vertical. Las redondas, por su parte, se aplican en construcciones de hormigón mayormente.
Asimismo, pueden encontrarse las platinas. Las mismas pueden ser rectangulares o cilíndricas, y se aplican en la construcción de rejillas, parrillas o defensas de ventanas.
Luego, tenemos los alambres. Sin lugar a dudas estos son utilizados en infinidad de usos, pueden contar con diferentes calibres y vienen galvanizados también. Los alambres pueden servir de conductores de electricidad, e incluso como amarre; esto es la unión de varillas de anclaje en refuerzos de concreto de paredes y techos.
La versatilidad que presenta un material como el hierro ha permitido que éste sea utilizado para dar estructura a techos, así como también los perfiles de hierro, los cuales dan soporte a los techos y permiten la colocación de placas de Durlock en cielorrasos, por ejemplo.
A continuación, es vital contar con algunas recomendaciones para un óptimo uso del hierro.
Es importante tener en cuenta, en primer lugar, que si el hierro va a ser aplicado a la construcción, el mismo debe contar con ciertas certificaciones o pruebas en cuanto a su elongación, doblado y tensión, para asegurar eficacia en el resultado que se pretende conseguir, y por sobre todo seguridad.
Por último, y no menos importante, debe tenerse presente que si el hierro planea utilizarse en la construcción de obras de hormigón armado, el mismo debe encontrarse libre de óxido, para asegurar una mejor adhesión del cemento y el secado en el tiempo establecido.
Asimismo, se recomienda siempre resguardar al hierro bajo techo, para preservarlo del agua, y de otros agentes que pudieran afectarlo, como grasa, barro, aceite, etc.