En el mundo hotelero es muy común nombrar a la ropa de cama, toallas y mantelería que se utiliza para recibir a los huéspedes como “los blancos” o ropa de blanco.

Esta denominación se debe a que en los hoteles se elige dicho color para vestir las camas de las habitaciones y para las toallas que se utilizan, como así también para las batas, y la mantelería del restaurante.

La elección del color blanco para los textiles que se utilizan en un hotel se relaciona con la pulcritud y pureza que representa este color. En efecto, en un emprendimiento hotelero es extremadamente importante que el hotel sea limpio, y que el huésped así lo vea. La ropa blanca posee innumerables ventajas, entre las que se destaca la calidad y limpieza que se percibe. Esto es, una mancha es fácilmente detectada en una prenda blanca, lo cual no es tan fácil de observar en textiles de otro tono. Además, los textiles blancos pueden ser limpiados con profundidad mediante la aplicación de distintos químicos, que a pesar que desgastan el género, siempre los dejará impolutos. En cambio, en sábanas de otros colores no sería posible aplicar estos químicos que dejarían por resultado sábanas de distintas tonalidades.

La inversión que un emprendimiento hotelero realiza en la adquisición de la ropa de blanco es importante. Y no solo se refiere a la inversión inicial, sino también a los gastos que demanda la reposición de todos los textiles que se desgastan o dañan y que precisan recambio. Por ello, en Mayorista de Blanco Distribuidor Mayorista no solo podrá encontrar ropa de blanco de calidad, sino también a buen precio.

Detallando la ropa de blanco que se puede encontrar en un hotel, comenzaremos por la ropa de cama. Los géneros que se utilizan en la confección de sábanas para hotel poseen siempre poliéster y algodón, y cuanto más poliéster posean las mismas más resistentes resultarán.

Para los comercios hoteleros las sábanas recomendadas, y más solicitadas, son las percales. Se trata de sábanas realizadas con telas que poseen la misma cantidad de hilos en la trama vertical que en la horizontal.

El percal es el más utilizado por los hoteleros debido a las bondades que presenta, entre las que se destacan que se trata de un género fácil de lavar y planchar, y que tiene una duración superior a otros géneros, debido a la cantidad de hilos que presenta por pulgada. En la actualidad, las sábanas compuestas por 200 hilos por pulgada son las más demandadas por los empresarios hoteleros, por considerar que las mismas poseen una mayor duración, mejor consistencia y gran confort, sin olvidar que son más resistentes.

Las sábanas de 200 hilos pueden considerarse de lujo, y por ende su costo es excesivo. Por ello, un tipo de sábana muy utilizado también es el superpercal, que aunque no cuenta con 200 hilos por pulgada, su calidad es muy semejante.

Por último, en cuanto a las toallas, la duración de las mismas en un hotel puede ser muy variable, oscilando de 6 a 7 meses, y si se trata de algodón de excelente calidad puede tener una vida útil de hasta 12 meses.

La mayor duración de una toalla se relaciona directamente con la cantidad de veces que la misma es tejida. La toalla ideal para un hotel es la que presenta un tejido compacto, ya que ello evita el deterioro de la prenda provocado por jalones con objetos como relojes, cierres, etcétera. Además, esta prenda debe ser cien por ciento de algodón.