Dengue, Zika y Chikungunya
El mosquito AEDES ARGYPTI se reconoce por sus patas con rayas blancas, es el transmisor de DENGUE – ZIKA – CHIKUNGUNYA.
SÍNTOMAS:
- Fiebre persistente.
- Piel con erupciones y manchas.
- Cansancio extremo.
- Dolor de cabeza.
- Dolor muscular o en las articulaciones.
- Náuseas y vómitos.
PREVENCIÓN:
- No acumular agua.
- Limpiar patios y canaletas.
- Cambiar agua de bebederos y floreros.
- Usar repelente.
- Colocar tabletas y espirales.
- Cubrir brazos y piernas.
Son enfermedades virales graves que se transmiten por la picadura de un tipo especial de mosquito. El mosquito transmisor es el Aedes argypti (sus patas tienen rayas blancas).
Si tenés alguno de estos síntomas, no te automediques. Consultá al médico o acercate a un centro de salud.
HISTORIA DEL DENGUE:
El reporte más antiguo se remonta a China.
El dengue es una enfermedad que acompaña al hombre desde hace siglos. El registro más arcaico de esta enfermedad se encuentra en una enciclopedia china de los Síntomas de Enfermedad y los Remedios, publicada por primera vez durante la Dinastía Jin (265 a 420 DC). Los chinos la llamaban “agua venenosa”: pensaban que, de algún modo, estaba conectada con insectos voladores asociados al agua.
Las primeras epidemias compatibles con el dengue en Latinoamérica y el Caribe ocurrieron en las Antillas Francesas en 1635 y en Panamá en 1699. Sin embargo, los primeros reportes clínicos en la literatura médica atribuidos a esta enfermedad corresponden al año 1779 en la isla de Java, Indonesia, en el sudeste asiático, y a 1780 en Filadelfia, Estados Unidos. En las primeras décadas del siglo XX, los brotes fueron más comunes en Estados Unidos, con importantes epidemias en Florida en 1934 y en Nueva Orleans en 1945.
Los conflictos bélicos, a partir de la Segunda Guerra Mundial, generaron las condiciones para que el dengue resurgiera, principalmente por su impacto ecológico, poblacional y social. También influyó la intensificación del transporte comercial entre los puertos de la región del Caribe y el Sur de los Estados Unidos con el resto del mundo. De hecho, en 1954 se describió el primer caso de dengue grave, conocido como dengue hemorrágico, durante una epidemia de la enfermedad en Filipinas y Tailandia, en Asia.
El mosquito Aedes aegypti fue erradicado de América del Sur a mediados del siglo pasado, pero a partir de 1980 se reintrodujo en la mayoría de los países, entre ellos la Argentina, por el transporte desde zonas infectadas y la disminución de los sistemas de control.
Volvió a tomar notoriedad por el brote epidémico de dengue hemorrágico en 1981 en Cuba, seguido del segundo gran brote ocurrido entre 1989 y 1990 en Venezuela, hitos que indicarían la diseminación progresiva de dicha enfermedad como un fenómeno emergente en la región.